La Comisión Europea informa que se plantea la posible modificación de la actual Directiva europea sobre pesos y dimensiones de los vehículos para prevenir la fragmentación normativa y la reducción de emisiones por parte del transporte por carretera.
Una normalización entre todos los socios de la UE con ventajas e inconvenientes, según han adelantado las patronales del transporte.
Según Fenadismer, la finalidad de la posible revisión es la de contribuir a la reducción significativa de las emisiones de efecto invernadero procedentes del transporte, de las que el 26% proviene de los vehículos pesados y formaría parte de la Estrategia europea de Movilidad Sostenible
La Comisión Europea admite que en la actualidad hay una “auténtica fragmentación del mercado del uso de vehículos de gran tamaño y con sobrepeso debida al mosaico de normas nacionales y bilaterales o multilaterales sobre pesos y dimensiones máximos así como el uso insuficiente de vehículos de combustible alternativo y de emisión cero y de dispositivos aerodinámicos” ha señalado Fenadismer. Por ello, se considera necesario “ecologizar el transporte por carretera” al acelerar el uso de vehículos pesados de emisión cero, así como garantizar la libre circulación de mercancías y mejorar el cumplimiento de las normas de tráfico transfronterizo.
Para conseguir objetivos se ha pensado en autorizar de manera automática el transporte transfronterizo de vehículos más pesados o más largos entre todos los Estados miembros vecinos que lo permitan y armonizar los pesos y dimensiones máximos con los límites más comunes permitidos actualmente; es decir, la normalización del peso adicional de hasta 44 toneladas como ya se permite en 13 Estados miembros y los sistemas modulares europeos de hasta 25,25 metros de longitud y 60 toneladas.
Como recuerda la asociación empresarial, la tramitación y aprobación de la nueva Directiva europea se alargaría al menos 2 años, pero a escala nacional el Ministerio de Transportes ya incluyó en los acuerdos suscritos con las asociaciones de transportistas el pasado mes de Diciembre su objetivo de introducir las 44 toneladas en la flota de transporte española, lo que llevaría a cabo a principios de 2023 de forma escalonada y siempre en coordinación con las organizaciones del sector, junto a la simplificación de los requisitos para la autorización y circulación de los megacamiones de 25,25 metros y de los duotrailers.
El aumento del tonelaje de los camiones a 44 toneladas ha sido objeto de diferentes estudios por parte de diferentes entidades académicas, entre otros, la Escuela de Ingeniería del País Vasco, por encargo de la Fundación Quijote por el Transporte, a la que pertenece Fenadismer, para analizar las repercusiones que tendría dicho cambio legislativo en la normativa estatal que supondría aumentar un 15% más la capacidad de carga de los camiones.
Así, entre los efectos negativos destaca su impacto sobre las carreteras, al aumentar el deterioro del firme entre un 42% y un 59% superior dependiendo del firme. Por el contrario, entre sus aspectos más positivos destaca su aportación en la mejora del medioambiente, al conseguir una disminución global de las emisiones en torno al 3,7%, aunque podría desincentivar la renovación de la flota hacia vehículos propulsados con combustibles alternativos, así como el desarrollo del transporte intermodal.
Adelanto de medidas en la UE
Aquí la información proviene de medios de comunicación españoles. Para conseguir estos objetivos, se proponen algunas medidas concretas. Por ejemplo, autorizar de manera automática el transporte transfronterizo de vehículos más pesados o más largos entre todos los estados miembros vecinos que lo permitan; además de armonizar los pesos y dimensiones máximos con los límites más comunes permitidos actualmente. El peso adicional sería de hasta 44 toneladas, como ya se permite en 13 estados miembros, y los sistemas modulares europeos de hasta 25,25 metros de longitud y 60 toneladas.
La tramitación y aprobación de la nueva directiva europea se alargaría al menos 2 años. No obstante, es importante recordar que, a nivel nacional, el Ministerio de Transporte incluyó en los acuerdos suscritos con las asociaciones de transportistas su objetivo de introducir las 44 toneladas en la flota de transporte española. Esto se llevaría a cabo a principios de 2023, de forma escalonada y en coordinación con las organizaciones del sector.
El aumento del tonelaje de los camiones a 44 toneladas ha sido objeto de diferentes estudios por parte de entidades académicas, con el objetivo de analizar las repercusiones que tendría este cambio legislativo en la norma estatal; lo que supondría aumentar un 15% más la capacidad de carga de los camiones.
Asimismo, entre los efectos negativos destaca su impacto sobre las carreteras al aumentar el deterioro del firme (entre un 42 y un 59% superior). Por otro lado, como aspecto positivo es reseñable su aportación en la mejora del medioambiente, al conseguir una disminución global de las emisiones en torno al 3,7%.
ar.